Mons. Pedro Collar invitó en la Vigilia Pascual de este sábado 30 de marzo a anunciar que Jesús ha resucitado. “acompañar nuestro anuncio con el testimonio” y ser luz para el mundo.
En su homilía Mons. Pedro Collar habló de cuatro puntos principales de esta Vigilia Pascual. En primer lugar del misterio de la luz, el pregón pascual. “El Resucitado mismo es Luz, la luz del mundo. Con la resurrección, el día de Dios entra en la noche de la historia. A partir de la resurrección, la luz de Dios se difunde en el mundo y en la historia. Se hace de día. Sólo esta Luz, Jesucristo, es la luz verdadera. Él es la pura Luz: Dios mismo, que hace surgir una nueva creación en aquella antigua, y transforma el caos en cosmos. La invitación que el Señor nos hace en esta noche es clara, hemos encendido nuestras lámparas para que así como esta luz ha iluminado las tinieblas de la noche, así cada uno de nosotros, iluminemos nuestro mundo. Especialmente aquellas zonas y regiones donde tantos y tantos hombres llevan una vida oscura y se han acostumbrado a vivir y actuar como hijos de la noche y de las tinieblas”
En segundo lugar los “portentos que el Señor obró desde el principio a favor de su pueblo, especialmente trayéndonos a los oídos el alegre mensaje de la resurrección”. En este sentido también habló “que como seres humanos estamos sedientos de Dios y nuestra vida y nuestra identidad, no se explican sin él. Sin embargo, muchas veces buscamos a Dios donde no está, donde lo único que encontramos y con lo que nos topamos es con muerte, con indiferencia, con egoísmo, con soberbia, con envidias, con la búsqueda de los propios intereses”.
En tercer lugar la liturgia bautismal, “pues necesitamos de manera libre y voluntaria, volver siempre la mirada a la esencia del evangelio, al amor de la primera vez, ese amor que nos cautivó y nos hizo discípulos de Cristo”.
Finalmente habló del último punto de la Vigilia Pascual, la Eucaristía. “Nos unimos a Cristo que nos hace partícipes de su Cuerpo y de su Sangre para formar un solo cuerpo. Para dejarnos una prenda de este amor, para no alejarse nunca de nosotros y hacernos partícipes de su Pascua, instituyó la Eucaristía como memorial de su muerte y de su resurrección”.
Por último deseo una feliz Pascua de Resurrección para todos.
Ciudad del Este, 30 de marzo de 2024
Oficina de Comunicación y Prensa, Diócesis de Ciudad del Este
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