El sumo pontífice se encuentra fuera de Roma desde el 02 de setiembre, dando inicio a un recorrido por cuatro países en Asia y Oceanía. Se trata de un viaje de 12 días, el más largo de Francisco desde que inició su papado hace 11 años. El Objetivo es brindar un mensaje claro en torno a las crisis derivadas por el cambio climático y la convivencia interreligiosa entre estas poblaciones.
Durante su gira, tuvo la oportunidad de visitar Indonesia y Papúa Nueva Guinea, y actualmente se encuentra en Dili, la capital de Timor Oriental. El próximo destino del Papa será Singapur, donde llegará el 12 de septiembre.
Un pueblo que enseña a sonreír a sus niños es un pueblo con futuro
En la homilía de la misa celebrada en Dili, Francisco invitó a no tener miedo «de hacerse pequeños ante Dios, y los unos ante los otros». A los cerca de 600.000 fieles presentes en al explanada de Taci Tolu recordó que «haciéndonos niños permitimos la acción de Dios en nosotros».
«Dios se hace niño y no es sólo para asombrarnos y conmovernos, sino también para abrirnos al amor del Padre y dejarnos modelar por Él». «Esta realidad se revela hermosa en Timor Oriental, porque hay muchos niños; y ustedes son un país joven en el que en cada rincón la vida se siente palpitar y bullir. Y la presencia de tanta juventud y de tantos niños es un don inmenso, que renueva constantemente nuestra energía y nuestra vida».
Las palabras del Papa Francisco resonaron fuerte en la explanada de Taci Tolu, alcanzando a los cerca de 600.000 fieles congregados una zona protegida de la costa timorense, a menos de diez kilómetros de la capital, Dili. Este mismo lugar fue visitado en 1989 por San Juan Pablo II durante su viaje al país. A esta zona, caracterizada por paisajes pintorescos y una rica biodiversidad, acudió también el Papa Francisco para celebrar la Misa.
Fuente: Vatican News
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