El 24 de enero arrancó la primera Misa del novenario en honor a San Blas, presidida por Mons. Pedro Collar, obispo de San Juan Bautista de las Misiones quien hizo un llamado a cuidar la naturaleza que Dios nos regaló y, por otro lado, no apegarse mucho a las cosas materiales.
En su homilía el prelado reflexionó sobre la lectura del libro del Génesis donde explicó la creación del mundo y la presencia del amor de Dios en todo lo creado.
En otro pasaje de de su homilía tomó como referencia el capítulo VI de la encíclica “Laudato si” del Papa Francisco, que trata sobre la educación y espiritualidad ecológica. “Lo que Dios ha creado tenemos que cuidar entre todos. Debemos contemplar a Dios en el alma y en todas las cosas creadas y que en la Eucaristía lo creado encuentra su mayor elevación”.
Así también –haciendo alusión a la encíclica papal- instó a que “seamos consumidores responsables y cambiemos nuestros hábitos, e incluso hagamos sana presión sobre las empresas a favor del respeto al medio ambiente, donde eduquemos a favor de una ciudadanía ecológica”, indicó.
Sobre el punto, insistió en la práctica de los buenos hábitos y manejo de informaciones que orienten acciones como el uso del papel, plásticos, el consumo del agua, la separación de residuos, la plantación de árboles y otras prácticas más. “Todo esto aunque no cambie el mundo, nos devuelve un sentimiento de dignidad y esperanza”, enfatizó.
En otro orden de cosas, también mencionó “que la comida y el vestido son importantes, pero que son medios para una vida digna. Este sistema económico al que el Papa denomina la cultura de descarte, es perjudicial, ya que la gran mayoría de las personas viven preocupadas por la comida, bebida y con las ansias de comprar y consumir hasta el punto de no dejar espacio para otra cosa”. Luego, en relación a lo dicho expresó, “Jesús dice que la vida vale más que los bienes de consumo».
Y por último agregó, que siempre en primer lugar debemos buscar el reino de Dios y su justicia.
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